Boca sana con Ayurveda.

boca sana con ayurveda

La higiene bucal, según Ayurveda, no solo incluye dientes, sino encías, garganta y lengua. Poder masticar bien la comida también es un factor clave para una buena digestión. La boca, al igual que el oído y el olfato es una vía directa al cerebro, es decir, su salud influye en la capacidad del discernimiento y claridad mental. Sigue leyendo si quieres conseguir los siguientes resultados:

  • tener un aliento fresco
  • fortalecer las encías
  • prevenir el sangrado y la gingivitis
  • reducir las bacterias
  • prevenir las caries
  • lucir los dientes blancos
  • mejorar el sentido del gusto
  • reforzar la voz
  • tener una mayor claridad mental 

En Ayurveda seguir la rutina diaria o dinacharya es importante para prevenir las enfermedades y disfrutar de una buena salud. Esta rutina incluye algunas pautas y rituales sencillos para mantener una buena higiene bucal:

  1. Al levantarse, raspar suavemente la lengua con un limpiador de lengua y enjuagar la boca con abundante agua templada. De esta manera eliminamos la capa blanca de toxinas acumuladas durante la noche y evitamos tragarlas de nuevo. Esa capa blanca, llamada ama en Ayurveda, es el exceso de comida sin digerir y las toxinas que se acumulan en nuestro aparato digestivo. Cuando sigues una alimentación adecuada y tienes una buena digestión (agni), apenas habrá restos de ama. Eso nos lleva al siguiente punto.
  1. Seguir una dieta adecuada. Las enfermedades periodontales son un indicio de que hay toxinas en el aparato digestivo. La presencia de hasta 5 tipos diferentes de bacterias destructivas demuestran que la placa y el sarro son el resultado de nuestra dieta y la capacidad de nuestro sistema digestivo. 
  1. Hidratarse. Empieza el día con un vaso de agua templada (después de lavarte la lengua y la boca) e hidrátate bien con el agua templada (nunca fría) durante el día.
  1. Dentífricos. Lávate los dientes, a ser posible con una pasta dental que contenga hierbas naturales amargas y astringentes como neem, sin flúor, ni conservantes. Subrayo, sin flúor (he hablado de eso con más detalle en otro post). La savia de las ramitas del neem elimina toxinas, reduce las inflamaciones, es fungicida, bactericida, evita el mal aliento y combate la caries y la formación de placa. La madera del neem tiene virtudes extraordinarias para evitar las enfermedades periodontales. En estudios clínicos realizados con 50 pacientes con gingivitis, después de sólo tres semanas de cepillarse dos veces al día con una pasta que contenía neem, el 80% mostró una mejoría significativa, los pacientes también mostraron un 50% de reducción en las poblaciones bacterianas y la eliminación de halitosis sin efectos colaterales. También puede tratarse masticando directamente hojas frescas del neem.
  2. Cepillos naturales y palillos dentales de neem. Para la limpieza interdental Ayurveda recomienda los palillos de madera de neem que al  rozar con el esmalte no lo perjudican en absoluto. Si te resultan incómodos o difíciles de conseguir, utiliza el hilo dental, pero con suavidad. Los cepillos dentales perfectos son suaves, de cerdas naturales, que limpian los dientes sin dañar las encías. Es mejor evitar los cepillos eléctricos de plástico y los palillos dentales de aluminio. Las fibras de plástico y una espiral de aluminio que las sostiene pueden rayar el esmalte. La vibración y pulsación de la cabeza rotatoria sobre unos dientes sensibles y el cepillado agresivo puede provocar una pérdida de esmalte, lo que expone a la dentina y crea mayor sensibilidad dental. La técnica de limpieza correcta es el barrido suave en la dirección desde la encía y hacia fuera.
  3. Enjuagar la boca y masajear las encías. Existen muchas opciones, te cuento algunas, elige a tu gusto. La clave para los cuidados de la boca es utilizar las hierbas naturales de sabor amargo y/o astringente y evitar los químicos. Es mejor no utilizar los enjuagues químicos, especialmente con clorhexidina, ya que los químicos, además de el peligro de manchar los dientes, destruyen todas las bacterias, incluidas las buenas, lo cual aumenta el riesgo de padecer cáncer de boca y de garganta. Puedes enjuagar la boca con agua ligeramente salada (utiliza la sal no refinada, tipo marina o sal rosa del Himalaya). Ocasionalmente puedes hacer también gárgaras de agua salada con una pizca de cúrcuma (y neem, si aguantas su amargura) para prevenir la faringitis y amigdalitis. También es recomendable enjuagarse la boca con aceite de sésamo (si no hay inflamaciones) o aceite de coco (especialmente con gingivitis, ya que este aceite refresca). Llena un tercio de la boca con el aceite y agita fuerte durante 10-15 minutos haciendo buches. Una alternativa es hacerse un enjuague bucal con diez gotas de aceite de árbol de té en ½ taza de agua. Es antiséptico, mata las bacterias y fortalece las encías. Otra opción es masajear las encías con aceite de coco o sésamo (según dosha). Pon una pequeña cantidad de aceite en el dedo índice y realiza un masaje de las encías con un movimiento circular tanto en el interior como en el exterior durante un par de minutos. 
  4. Practicar relajación facial (y mental) y acordarse de soltar la mandíbula. Existen muchas técnicas. Por ejemplo, masajea tus mejillas con los nudillos para soltar la tensión y evitar el rechinamiento de los dientes y el bruxismo nocturno. Un truco adicional es masajear la parte detrás de la oreja con el aceite templado de sésamo o apretar el punto marma detrás de la oreja.

Si sigues estas pautas, incluso en un mes puedes notar una mejoría sorprendente.

¡Salud y consciencia con ayurveda!

Deja una respuesta